¿Quién diría que el universo conspiraría para unir a dos polos opuestos? ¿Quién pensaría que han pasado once años desde que nuestros universos colisionaron?
Éramos dos adolescentes con una sola cosa en común: jugábamos a saber lo que era amar. Pero el paso del tiempo nos ha dado una lección: hemos aprendido que el amor verdadero está en las buenas y en las malas, que cuando estás con la persona correcta el camino es más ameno y el amar crece con cada momento compartido..
Nueve años después de decir "SÍ" para caminar en el mismo sentido, confirmamos que no fue casualidad coincidir entre tanta gente y que nuestro destino era estar uno al lado del otro.
Ahora decimos "SÍ" para convertirnos en dos amantes que bailarán el resto de sus días al compás de una extraña melodía que llamaremos nuestra vida.